Alex Chinneck, sorprendió con su obra en
Londres donde colaboraron más de cien personas de varias disciplinas, durante
un periodo de más de ocho meses, en la que logró la ilusión de flotar.La creó
al ocultar un contrapeso de cuatro toneladas. También sorprendió con una
instalación publicitaria, en la que el pavimento parecía desprenderse con un
vehículo a 4,5 metros del suelo, en Londres.
Chad Wright, interpreta al sueño Americano
en el mar, parte de la diversión de la construcción de un castillo de arena en
la playa, Chad evoca algo de mal humor y oscuridad, el objetivo del estudio es
sintetizar ideas con los objetos.
Gabriel Dawe, su obra se centra en la
exploración de los textiles con el objetivo de examinar la construcción además
de la conexión entre la moda y la arquitectura y como se relaciona con la
necesidad humana de refugio en todas sus formas.
Doris Salcedo, su obra se realizó con
1600 sillas equilibradas unas sobre otras, entre dos edificios en Estambul.
Doris abrió una grieta en la prestigiosa meca del arte contemporáneo, la grieta
simboliza según ella, el agujero que hay entre la humanidad y la falta de
humanidad.
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